La pequeña historia de mi gordi

A petición popular y viendo que el sentido de este blog se ha quedado en stand-by voy a hablaros un poquito del sol de mi casa. Os enseñaré fotos de como ha ido creciendo hasta hacerse todo un hombrecito y contaré anécdotas y las visicitudes "normales" que he pasado con él desde que llegó a mi vida y un par de meses antes.
Pues bien, hace aproximadamente 6 años y un par de meses tuve un presentimiento: sabía que estaba embarazada, !!SI¡¡ lo sabía. Y cómo os preguntareis, pues no lo sé, sólo lo sabía sin más. Esperé 3 semanas para hacerme el test. Por un lado yo decía para qué me lo voy a hacer ya me bajará la regla (engañándome a mi misma claro) y por el otro tenía un miedo tremendo a que saliera rosa. La verdad es que si no hubiese salido rosa me hubiese llevado un gran decepción.
Empecé a notar como mi pecho se hinchaba a lo bestia y me dolían los ovarios más de lo normal. Total que yo sin saber si estaba o no estaba a ciencia cierta pues ya hablaba con mi bebé, le preguntaba si estaba por ahí y si se pensaba quedar...fue algo raro la verdad. Pero me hice el test y después de un llanto incontrolado me dí cuenta de que pensaba quedarse en mi vida. Tuve muy claro que lo quería conmigo, que no me desharía de alguien que había venido a traerme tanta felicidad.
La verdad no fué fácil decirlo pero tampoco fué horrible. La familia se sorprendió pero contamos con el apoyo de todos y también con su ilusión por ser abuel@s, tí@s, bisabuel@s, ti@s-abuel@s... A partir de ahí todo fue sobre ruedas, revisiones, ecografías, analíticas todo en la Seguridad Social y genial, no tuve problema alguno con nadie. Bueno el Dr. que me hizo la eco 20 era un pelín borde y nos dijo no con mucho entusiasmo que era un niño sin decirnos casi ni buenos días....pero bueno no nos importó mucho porque el nene estaba muy bien. Empezamos como locos a buscar nombres pero no nos poníamos de acuerdo. Mi madre me regaló un libro de nombres en el que aparecían nombres como Alarico y cosas así, con lo cual no nos ayudó mucho ya que no nos ibamos a leer los 1000 nombres (sin exagerar) que venían en el libro. Hasta que un día no sé como dijimos Alejandro y nos gustó. Empezó mi madre a hacer cuadros con su nombre y variados y empezamos a comprar cosas. La verdad es que nos regalaron casi todo la familia, por no decir todo. Así que sólo tuvimos que comprar ropa y chorraditas varias. Me compraba todas las revistas de bebés del mercado y me las empollaba como para una oposición...que tonta verdad!!! hoy no haría pero las mamás primerizas lo hacemos. La verdad es que luego los bebés te dicen que es lo quieren y las mamás casi siempre les entendemos.
En fin, que como digo tuve un embarazo de lujo sin vómitos ni mareos ni antojos ni casi ascos (sólo un poco de manía al papá por ser el culpable de mis kilos de más jaja). Pasó el verano, el otoño y entró el invierno y mi tripa era más que considerable (17 kilos encima) y con la ginecóloga detrás de la nuca para que dejara de comer, que fué el único vicio que tuve.
En noviembre me dí la baja médica por dolor de espalda y porque tenía que ir y volver del trabajo todos los días 4 veces en coche y dolor en el pubis. Mi gine me dijo que quizá se adelantara a diciembre porque estaba muy colocado y empezaron las porras a ver quien acertaba la fecha de nacimiento. Salía de cuentas el 18 de enero y siendo mi cumpleaños el 17 pues ya adivinais mi apuesta verdad?? He de decir que no se adelantó y nos dejó pasar las navidades tranquilos y que yo gané la apuesta. Un gran regalo de cumpleaños.