jueves, 20 de noviembre de 2008

Pensamientos en voz alta


Hoy quiero hacer una reflexión en voz alta: las relaciones de pareja al desnudo.


Quiero hablar sobre los inicios, su estabilidad, sus crisis y otras muchas cosas. Esto no quiere decir que esté hablando en primera persona ni que yo me sienta identificada con todo lo que escriba.

Por mi profesión y mi forma de ser hablo con mucha gente al cabo del día, lo que hace que me cuenten muchas cosas de sus vidas. Soy una persona a la que le gusta hablar pero que, sin duda alguna, también sabe escuchar y reflexionar sobre lo que oigo.


Leyendo algunos de los relatos que hay en la blogosfera recuerdo mucho el inicio de mi relación sentimental con mi queridita L., lo especial que me sentía por tener esas sensaciones y la idea de que sólo quería estar con ella el resto de mis días. Esto es muy bonito pero no siempre es así. Tod@s nos hemos sentido alguna vez en una nube pensando que es esa persona la única que será capaz de hacerte volar y la única con la que podrás estar compartiendo tu vida. Falso. En la época de nuestros padres era raro que una persona hubiese tenido más de un/a novi@ (aunque haberl@s los había). Lo normal es que tuvieses un/a novi@ y sintieses o no mariposas en el estómago te casaras con el/la. Por suerte eso ya no es así. Uno puede probar y decicir si siente o no siente. Y además puede elegir sentirlo varias veces. Hay personas que lo tienen muy claro y son capaces de llegar hasta el final y otras son cobardes que se asustan y lo dejan pasar. Y también las que sienten cosas por alquien y pueden sentirlo además por otra persona (un lío). Yo quiero hablar de las que no lo dejan pasar y deciden subirse al carro de las relaciones de pareja. El camino de una pareja no es nada fácil, o eso me parece a mí. Al principio todo es rosa y muy fácil, nos queremos, nos necesitamos, nos complementamos y parece que todo va a ser siempre. Luego si todo va bien empieza la parte de buscar como compartir la vida, o sea, encontrar casa. Y ahí vienen los problemas: manías, encontrar el lado de la cama, hacer la compra, dividir tareas, compartir enfados, aficiones y responsabilidades.....un sinfín de cosas que hacen la convivencia tan divertida. Todo lo que al principio nos vuelve locos acaba por encontrar su sitio en la casa y todas las tareas acaban bien repartidas (no siempre) hasta llegar a ser rutinarias. Y ahí es donde entra la imaginación. Hay que apañárselas para que la rutina no llegue a tu pareja y se acabe siendo compañeros de piso. Y ahí uno se cuestiona: ¿he hecho algo mal?, ¿sigo queriendo a mi chic@?, ¿que puedo hacer para cambiar esto?. Y entonces hay que sentarse con el/la y buscar soluciones. O sentarse con uno mismo a reflexionar.


Yo personalmente reflexiono mucho sobre la condición humana en general y sobre los comportamientos animales que todavía tenemos. Como nos comportamos socialmente, lo que buscamos en la vida, lo que nos da placer (en el amplio sentido de la palabra), los instintos, la infidelidad, la conciencia humana, lo que nos hace diferentes de las bestias.

Hay tantas soluciones como parejas existen, cada cual busca la suya y, a mi parecer, no se debe buscar aprobación en nadie que no sea la pareja. Uno puede romper la rutina saliendo de vez en cuando de fiesta como cuando no se tenían responsabilidades o quedando con amig@s de juventud o separándose de vez en cuando un rato para echarse de menos o buscando relacionarse con otras personas o abrirse a un mundo mucho más complejo. A todo esto, hace no mucho oí hablar de algo llamado "triamor". Viene a ser algo así como una pareja de 3. Tres hombres, tres mujeres o uno de uno y dos de lo otro. A veces pienso que sería divertido, pero cuando me paro a pensarlo mejor creo que sería triple lío. Si dos no se ponen de acuerdo pues ni me imagino siendo tres. En realidad todas estas posibilidades son totalmente válidas si los interesados lo aceptan. Lo bueno es poder elegir.


Luego están los tiempos de crisis, que es cuando la rutina llega a límites insospechados. Pasan los días igual, piensas que te falta mucho por hacer y en tu vida diaria no lo vas a conseguir, nuevos horizontes se pueden abrir delante de tí y no ves como llegar hasta ellos. ¿qué hacer?, ¿romper con todo y probar suerte?, ¿y si te equivocas?, ¿y si no haces nada y te arrepientes?, ¿cuál es el daño que una pareja puede o debe soportar?, ¿son las relaciones para siempre?, ¿soy yo el/la que no es capaz de mantener una relación?. Son muchas las preguntas que nos pueden pasar por la cabeza y también son muchas las respuestas posibles.


Esto me hace pensar que somos muy complicados. La sociedad nos hace complicados. En algunas tribus africanas las relaciones personales son abiertas, lo que quiere decir que aunque se unen en parejas pueden tener relaciones extramatrimoniales de forma natural sin que eso suponga motivo de crisis ni una merma en los sentimientos hacia su pareja (bueno eso sólo es una suposición). En cierto modo es una situación ideal; rompes la rutina y no hay problema después, aunque no creo que estemos preparados todavía para eso.

Con todo esto no pretendo hacer ver que en las parejas son todo problemas, aburrimiento,etc...simplemente es escribir lo que pasa por mi cabeza buscando entender la naturaleza humana. Las parejas son maravillosas, son la expresión de la complicidad y de la generosidad, nos dan amor, compañía, respeto, confianza y muchas otras cosas; pero está claro que no todo el mundo está preparado para vivir en pareja.

8 comentarios:

Ana Mar dijo...

Ni que lo digas las relaciones de pareja o bueno cualquier relación de convivencia diaria bajo un mismo techo tiene tela.
Aqua

niobeia dijo...

Me ha encantado tu reflexión, aunque la primera parte mucho mas. Supongo que porque ahora mismo me encuentro en un momento de "super crisis" de pareja y añoro los momentos del inicio, esos tan maravillosos que ahora no sabemos recuperar.
Ahora mismo intentamos dar respuesta a las preguntas que has planteado y a otras mil que me surgen a cada momento, sin encontrar una respuesta clara o que me convenza, ya que ultimamente la solución que veo me gusta mas bien poco. Quizá solo sea la unica, quizá sea el fin...

Alejandra dijo...

Me ha gustado tu blog... estaré llegando mas a menudo

y esta reflexion es excelente

besos y suspiros
alejandra

Edea dijo...

muchas gracias chicas. niobeia me he pasado por tu blog pero veo que estás empezandolo asi que no se muy bien a que se debe tu supercrisis pero ya me iré enterando. de todas formas si necesitas algo ya sabes.

alejandra no he mirado si tienes blog, mañana con más tiempo le echo un vistazo.

gracias otra vez

Romina dijo...

Tu reflexion.... mas que cierta. Hace mas de un año pasé una crisis con mi pareja, el motivo es que no supe afrontar que las maripositas del estomago se iban calmando, y tonta yo, pensaba que el "amor" se estaba yendo.... Tras reflexionar muchisimo me di cuenta de que la "pasion" del comienzo estaba dando paso a un amor puro y verdadero. Felicidades por tu blog, y espero seguir teniendo el gusto de leerte con frecuencia.

CRISA dijo...

i si claro q mejor 300 jaja y con eso pa ctos intentos da?bss

CRISA dijo...

entonces a ver vosotras teneis uno ya?y vais a por otro o me estoyrallando?

Edea dijo...

Crisa, los 300€ son por inseminación y cada inseminación son dos días seguidos. Asi que si no te quedas pues la siguiente vez tienes que pagar otros 300€ ok?? Igual que en cualquier clínica, solo que aqui en vez de pagar todos los gastos solo serían los del semen. Espero haberte aclarado. Tu preguntame cualquier duda que tengas.

Romina, gracias por tu comentario. Es muy satisfactorio que compartais mis opiniones y aunque no los compartais pues que opineis acerca de ello. Saber que mis palabras son leidas por otra gente "me llena de orgullo y satisfacción". Y sí supongo que esa crisis de pérdida de mariposas la tenemos todos alguna vez.